La elección entre las distintas clases de agujas viene determinada por el grosor de la tela que vayamos a utilizar.
- Agujas simples: de una punta, son las más usuales.
- Agujas dobles: de dos puntas, se encuentran con diferentes grados de separación entre una y otra.
- Agujas triples: de tres puntas, de uso decorativo.
Dentro de las más usadas, las simples, encontramos diferentes números según su calidad de grosor.
Así, por ejemplo, las más finas son las de 60-70 y se usarán para tejidos finos y delicados.
Luego vendrán las de 75-95, que se usarán para tejidos intermedios como el algodón. Las de 100-110 se usan para tejidos gruesos como los vaqueros. Y, por último, las de 120 para tejidos de tapicerías.
Es conveniente tener en casa agujas universales de diferentes grosores aunque también necesitaréis agujas para proyectos especiales.
En los tejidos de punto o elásticos es conveniente utilizar agujas de coser de punta de bola para evitar romper las fibras del tejido.
Utilizaremos agujas denim al coser vaqueros y agujas de cuero al coser piel. Y siempre recomendamos, en caso de duda, preguntar a la persona que os atiende sobre que tipo de aguja es el más adecuado para cada tejido.
Por último aseguraos que la aguja esté en buenas condiciones para su uso. Si está torcida o despuntada, desechadla.
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