Tal y como vimos la semana pasada, el algodón es una planta conocida desde la Antigüedad en Persia y Babilonia.
Pero, ¿quieres saber más? Pues hoy en Textiles Pastor te lo contamos todo.
Historia del algodón
El algodón no fue al principio un producto popular por su alto precio: sólo las familias pudientes se lo permitían, y desde luego apenas trascendió a la España cristiana, donde era casi desconocido.
La industria algodonera fue española en la Edad Media y continuó su importancia en Andalucía, sobre todo en la zona de Motril. En el siglo XVIII y XIX era tan abundante su cosecha que alimentaba los telares catalanes y los de la industria italiana de Livorno o Liorna.
Asimismo se enviaban las partidas sobrantes a Francia e Inglaterra. Ello hizo que su cultivo se extendiera por las vegas granadinas y malagueñas y llegara hasta Murcia y Valencia.
El algodón en América crecía como planta indígena (Hernán Cortés lo encontró en México), Mayas e incas tejían con algodón sus vestidos. Algo que sorprendió a los navegantes españoles, igual que sucedió con la historia de la patata.
Más tarde, en el primer tercio del XVIII, el algodonero era cultivado como planta de jardín en aquellas latitudes. Hacia el último cuarto del siglo XVIII, fue introducido en la colonia inglesa de Maryland y desde entonces la producción y exportación del algodón norteamericano fue en aumento.